Tu tan...tu
Se me atragantó el nudo de tu corbata,
y me cegó el negro de tus ojos casi perfectos,
intoxicada por tu perfume de madrugada,
(de marca, claro)
y tanto comer con clase,
indigestión de manjares,
y tantas lunas tan perfectas,
y sonrisas profident,
y tu cara con menos pelos que mis piernas,
y tu coche siempre tan limpio…
escapé de tu perfección, lo siento,
solo quiero un bocadillo y que me moje la lluvia
aunque se me corra el rimel…
OLE.
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